La noche lloraba estrellas
en aquellos ojos ciegos,
cataratas de luz tenue,
torrentes de rayos tiernos
de una luna de verano,
iluminando silencios
azules por los sembrados,
azules por los senderos.
Pero los ojos buscaban
más allá del universo,
un lucero de brillantes
que iluminara su miedo.
Cataratas de amargura,
alumbran noches de perros,
rompiendo con sus ladridos,
los corazones deshechos
por una pena que el alma
va sembrando por los cerros.
La noche sigue llorando
lágrimas de oscuros miedos.
MANUEL PABLOS
PROFESOR DE LA FARGA
PROFESOR DE LA FARGA
¡preciosos versos "lorquianos" plenos de lirismo¡¡
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