Redondillas que te escribo
del amor y sus recuerdos,
que ni locos ni tan cuerdos
cuando el fuego estaba vivo.
Este amor que es arrebato;
esta flecha que se clava;
esa noche que soñaba
amarte y no solo un rato.
Eso es amor de verdad,
lo sabe quien lo vivió,
y más de una vez probó
la ausencia y la soledad.
En la lucha del más quiero
quien más puede es la pasión,
no se engaña al corazón
si el cariño es verdadero.
Por nuestro amor cada día
luchamos codo por codo
y ahora que se acabó todo
solo queda melancolía.
Más hermoso es el perdón
que se pide escrito en prosa,
y cosa maravillosa
viajar a tu corazón.
que se pide escrito en prosa,
y cosa maravillosa
viajar a tu corazón.
Que difícil fue quererle
le dije anoche a la luna;
puedes convivir toda una
vida..., y a ella no conocerle.
Por causas inexplicables
nuestro amor fue fugitivo;
del adiós definitivo
mejor no buscar culpables.
Que importa como ni cuando;
que importa el color del cielo
vos sabéis de mi desvelo
porque me estoy enamorando.
Sin juzgar fui condenado;
quiero decirlo alto y claro;
que tu fuiste luz y amparo
de este ciego desdichado.
El bajar a los infiernos
o bien aceptar el engaño,
haciéndonos siempre daño
por querer o no querernos.
Francisco García Tras de las Casas
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