martes, 17 de septiembre de 2013

LOS HOMBRES LIBRES










La piqueta de Tasio quedó muda,

la llana deslizó su pena y llora

porque la mano que marcó sus horas

en las paredes crudas, ha callado.

Enmudecieron hasta los tejados

viendo al hombre vencido caer al suelo;

el viento lo lloró con desconsuelo

cuando la tierra madre le dio amparo.

 

Atrás quedaron triunfos y fracasos,

auroras rotas al nacer el día,

ilusiones, amores fantasías…

La tierra lo tapó con su regazo,

la luz, roto el color, enmudecía

cuando enganchados en un tierno  abrazo

los dos en uno solo se fundían.

 

Tasio creció mirando la llanura

que marcaba sus noches y sus días,

sus espacios de luz, las melodías

de los jilgueros en las zarzamoras,

los soles, las heladas, las auroras…

 

Dejó girones entre los zarzales

de un alma atribulada por la pena

y pagó, como todos, la condena

de vivir para hacernos inmortales.

De la nada salió, porque en la nada

le tocaba vivir, como a los otros.

 

Destetaban las yeguas a los potros

por el hambre heredada de otros tiempos.

Abierto el costurón del sentimiento

el hombre mató al hombre y a la idea;

se volvieron tempestades los vientos,

las tempestades parieron peleas,

 dolor, envidias y resentimientos.

 

La Tierra desertó de ser la madre

condenado a los hijos al destierro.

Callaron la razón, sacaron hierro,

y cambiaron los panes por el hambre.



Los campesinos fueron un enjambre

de obreros doblegados todo el día.
 
 
 
 
 
MANUEL PABLOS
 
PROFESOR DEL COLEGIO LA FARGA

1 comentario:

  1. ¡Bellísimos endecasílabos CASTELLANOS escritos por el poeta salmantino ¡¡

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